Queridas hermanas:
Ha vuelto a donde ustedes desde París, porque, en la otra casa que trabajaba había mucho trabajo porque eran siete hermanos y hermanas muy traviesos. Además de eso, la casa era demasiado grande. Y lo peor de todo era que, le trataban muy mal.
Como los niños eran tan listos, después de limpiar todo bien, ellos lo ensuciaban otra vez. Pero la criada no se enteraba porque, depués de limpiar todo, se sentaba en el sofá para descansar y mientras, los niños/as lo ensuciaban todo. Y así, hasta que llegase los padres de su trabajo. La criada cada día, alucinaba más, diciendo "pero que hago"... Hasta que descubrió que eran los niños que ensuciaban queriendo.
No se iba a otra casa a trabajar, porque le pagaban muy bien y porque nadie necesitaba una criada.
Entonces, por estos motivos, os pido por favor, que le dejen trabajar en vuestra casa.
P.D: Gracias por leer esta carta.
Ha vuelto a donde ustedes desde París, porque, en la otra casa que trabajaba había mucho trabajo porque eran siete hermanos y hermanas muy traviesos. Además de eso, la casa era demasiado grande. Y lo peor de todo era que, le trataban muy mal.
Como los niños eran tan listos, después de limpiar todo bien, ellos lo ensuciaban otra vez. Pero la criada no se enteraba porque, depués de limpiar todo, se sentaba en el sofá para descansar y mientras, los niños/as lo ensuciaban todo. Y así, hasta que llegase los padres de su trabajo. La criada cada día, alucinaba más, diciendo "pero que hago"... Hasta que descubrió que eran los niños que ensuciaban queriendo.
No se iba a otra casa a trabajar, porque le pagaban muy bien y porque nadie necesitaba una criada.
Entonces, por estos motivos, os pido por favor, que le dejen trabajar en vuestra casa.
P.D: Gracias por leer esta carta.